PSOE, Ciudadanos C´s e IU-LV en aras de austeridad plantearon al resto de grupos una propuesta conjunta ventajosa para las arcas municipales
Por primera vez en los últimos años el PP perdió en la noche del jueves 7 una votación en un Pleno del Ayuntamiento de Villanueva del Pardillo que le supuso no poder sacar adelante su propuesta sobre retribuciones para el equipo de Gobierno y los concejales de los grupos de la oposición
Este resultado, puso de manifiesto dos cuestiones verdaderamente significativas: por un lado, que el PP no puede llegar a acuerdos más allá del que logró para conservar el gobierno con un voto de abstención de UPyD y, por otra, que salvo este partido, los restantes grupos sí hemos sido capaces de llegar a pactos por encima de nuestros intereses partidarios pensando en el interés general de los pardillanos.
Más allá de las descalificaciones e insultos de la portavoz del PP, que vienen siendo habituales, se demostró que su talante negociador es nulo y ni siquiera logró cerrar un acuerdo con el partido que está llamado, en principio, a apoyarles en su dramática minoría.
Juan González Miramón y sus concejales tienen motivos más que de sobra para reflexionar sobre el resultado de su falta de flexibilidad y su carencia de talante negociador.
Y no se trata sólo del frío concepto de los números. Es una cuestión de filosofía: Psoe, Ciudadanos e IU-LV hemos entendido que, en las circunstancias actuales de la sociedad española, en la que se están pidiendo esfuerzos importantes a los ciudadanos, los cargos públicos tienen que convertirse en un ejemplo y en un referente de austeridad.
Por ello, pese a que partíamos de bases diferentes, hemos sido capaces en muy poco tiempo de cerrar un pacto, serio, viable, lógico y sensato, que supone una disminución de las retribuciones globales de los miembros de la corporación y un significativo ahorro para unas arcas municipales que ya no dan más de sí.
Hemos entendido que quien más gana debe hacer más esfuerzo, pero también hemos comprendido que todos sin exclusión debemos hacer ese esfuerzo. E, insistimos, que no se nos acuse de que las posiciones iníciales eran diferentes. Las que valen son las que se discuten en el Pleno y nada más.
Por primera vez en los últimos años el PP perdió en la noche del jueves 7 una votación en un Pleno del Ayuntamiento de Villanueva del Pardillo que le supuso no poder sacar adelante su propuesta sobre retribuciones para el equipo de Gobierno y los concejales de los grupos de la oposición
Este resultado, puso de manifiesto dos cuestiones verdaderamente significativas: por un lado, que el PP no puede llegar a acuerdos más allá del que logró para conservar el gobierno con un voto de abstención de UPyD y, por otra, que salvo este partido, los restantes grupos sí hemos sido capaces de llegar a pactos por encima de nuestros intereses partidarios pensando en el interés general de los pardillanos.
Más allá de las descalificaciones e insultos de la portavoz del PP, que vienen siendo habituales, se demostró que su talante negociador es nulo y ni siquiera logró cerrar un acuerdo con el partido que está llamado, en principio, a apoyarles en su dramática minoría.
Juan González Miramón y sus concejales tienen motivos más que de sobra para reflexionar sobre el resultado de su falta de flexibilidad y su carencia de talante negociador.
Y no se trata sólo del frío concepto de los números. Es una cuestión de filosofía: Psoe, Ciudadanos e IU-LV hemos entendido que, en las circunstancias actuales de la sociedad española, en la que se están pidiendo esfuerzos importantes a los ciudadanos, los cargos públicos tienen que convertirse en un ejemplo y en un referente de austeridad.
Por ello, pese a que partíamos de bases diferentes, hemos sido capaces en muy poco tiempo de cerrar un pacto, serio, viable, lógico y sensato, que supone una disminución de las retribuciones globales de los miembros de la corporación y un significativo ahorro para unas arcas municipales que ya no dan más de sí.
Hemos entendido que quien más gana debe hacer más esfuerzo, pero también hemos comprendido que todos sin exclusión debemos hacer ese esfuerzo. E, insistimos, que no se nos acuse de que las posiciones iníciales eran diferentes. Las que valen son las que se discuten en el Pleno y nada más.